La Secretaría de Agricultura expresa su confianza y respaldo a nuevos directivos del CIMMYT
Durante el encuentro “Fortaleciendo la cooperación internacional a través del desarrollo y la ciencia agrícola”, la Directora Ejecutiva de MASAGRO del Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT), Karen García, señaló que este programa –coordinado por la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA) y el CIMMYT- está incluido en el reporte de los Viceministros de Agricultura del G20 por considerarlo una referencia en investigación viable que impactaría en asociaciones público-privadas en el sector agroalimentario.
La especialista detalló que este nuevo esquema de producción, asistido por la innovación científica y tecnológica, está dirigido a pequeños y medianos productores de granos (maíz, trigo y cereales de grano pequeño) para aumentar los rendimientos, mejorar sus ingresos y contribuir a mitigar los efectos del cambio climático en México mediante el desarrollo de semillas mejoradas, asistencia técnica y prácticas agrícolas sustentables.
Por el Foro Global de Investigación Agrícola (GFAR), Monty Jones, expuso la conveniencia de acordar un proceso para establecer las prioridades de investigación y desarrollo agrícola, así como los mecanismos para incrementar la productividad agroalimentaria en 60 por ciento para el 2050, en forma sustentable.
Por su parte, el representante del CIMMYT, Bram Govaerts, llamó a la comunidad internacional para apoyar estratégicas de investigación que permitan fortalecer la seguridad alimentaria global, donde la participación de instituciones públicas y privadas es clave para un mayor impacto en la producción de alimentos.
Destacó que en julio de 2011, durante la celebración del 40 Aniversario del Grupo Consultivo Internacional en Investigación Agrícola (CGIAR), México presentó el programa MASAGRO ante el Banco Mundial, y participa en Programas Globales de Investigación de Maíz (MAIZE) y Trigo (WHEAT) que el CGIAR ejecuta para incrementar el rendimiento de pequeños productores en diversas regiones de África, Asia y América Latina.
Asimismo, la iniciativa de México contribuye decididamente al avance de programas internacionales de desarrollo que cuentan con el respaldo del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el grupo de granos del Foro Económico Mundial (WEF), comentó.
Cabe señalar que la Fundación Bill y Melinda Gates consideró a MASAGRO como “el programa más original existente hasta el momento orientado a la agricultura más frágil a nivel mundial”, por lo que se prevé replicar esta experiencia en el sur de Asia, en países como Bangladesh, y en África Subsahariana. De esta manera, MASAGRO hace posible que países en desarrollo y desarrollados participen en investigaciones avanzadas que fomentan la seguridad alimentaria de México y el mundo.
Como parte de la reunión, se destacó que la comunidad científica internacional trabaja en los protocolos multilaterales para apoyar el desarrollo y expansión de las Plataformas de Colaboración de Investigación Global (GRIN-GLOBAL), a fin de hacer colecciones de germoplasmas con mayor facilidad de disposición para los investigadores integrantes de los países del G20.
Al respecto, el representante de la Secretaría de Agricultura de Estados Unidos (USDA), Simon Liu, destacó la oportunidad que representa definir políticas de acceso abierto a datos genéticos y genómicos de financiamiento público, lo cual repercutirá en el desarrollo de opciones para el establecimiento de información fiable y disponible para su aplicación en beneficio de productores en países en desarrollo.
Trabaja MASAGRO en cuatro líneas de acción para generar capacidades
El programa MASAGRO tiene cuatro líneas de acción o componentes que desarrollan investigación básica y aplicada para generar capacidades a lo largo de la cadena agroalimentaria de México.
El componente Descubriendo la Diversidad Genética de la Semilla procura recursos e infraestructura de alta especialidad a la comunidad científica mexicana, que permiten estudiar y aprovechar de la diversidad genética del maíz y del trigo en los programas de mejoramiento de semillas de ambos cultivos.
La Estrategia Internacional para Aumentar el Rendimiento de Maíz se hace cargo de mejorar la capacidad de adaptación del maíz a condiciones adversas y de impulsar la productividad de la industria semillera mexicana para incrementar, en forma sostenible, la producción de agricultores de temporal de pequeña y mediana escala.
La Estrategia Internacional para Aumentar el Rendimiento de Trigo coordina líneas de investigación complementarias en 30 países con el objetivo de elevar 50 por ciento el potencial de rendimiento del grano en los próximos 20 años mediante el mejoramiento de variedades de alta productividad adaptadas a las regiones trigueras de México y el mundo.
Por último, el componente Desarrollo Sustentable con el Productor es una estrategia de extensionismo rural basada en redes de colaboración que hace posible la adopción de prácticas agronómicas sustentables, la transferencia de tecnología y el aprovechamiento de semillas mejoradas de maíz, trigo y cultivos asociados que, en conjunto, incrementan la productividad y el ingreso del agricultor en forma sostenible.